De manera increíble, he conseguido estar casi tres semanas lejos de un ordenador (no, no me he deshecho del móvil, así que seguía conectado).
Eso ha producido una pausa en la escritura de mi sexta novela, pero creo que ha sido algo positivo. He vuelto con nuevas energías, y alguna idea nueva. Como siempre, me tocará releer una buena parte de lo escrito hasta ahora para volver a «meterme» en la historia.
Pero espero darle un buen empujón este otoño. Idealmente, debería estar casi lista para final de este año, para poder ponerme con las revisiones, las correcciones, la maquetación… Y sigo sin tener una idea clara del diseño que quiero para la portada. Me estoy planteando liarme la manta a la cabeza y hacer la ilustración yo mismo (sin IA, no te preocupes), pero no veo cuándo hacerlo.
En cualquier caso, estoy recopilando las nuevas ideas que han ido surgiendo durante las últimas semanas, e intentaré poner algo de orden y sentido. Hay nuevas discusiones en Internet (estoy descubriendo Reddit para alguna de ellas), y podríamos tener, de nuevo, un giro en el argumento.
Mientras tanto, he dejado un par de libros (mis dos primeras novelas) en sendos armarios de intercambio público. Uno en Candelario (Salamanca) y otro en Pals (Girona). Quiero ver si mis novelas se prestan para un «libro viajero», si atraerán el suficiente interés y la participación de los diferentes lectores. Pero eso es una historia a largo plazo, que puedes leer aquí.
No te vayas muy lejos. Seguiré contando mis novedades en esta web…